La devoción aracelitana se reencuentra llegado el otoño, anualmente desde que el 17 de julio de 1955 se realizara por vez primera, con un acto donde, a las plantas de Nuestra Amada Patrona María Santísima de Araceli, los hombres y mujeres del campo andaluz depositan los frutos de sus cosechas implorando su amparo y protección.
En este año que celebramos el 450 aniversario de su llegada desde Roma será la ciudad de Lucena la encargada de presentar esa ofrenda representada por su alcalde, don Juan Pérez Guerrero, quién el próximo domingo, 7 de octubre, a las 11’30 de la mañana, depositará ante el altar del Real Santuario: el trigo, el pan, las aceitunas, el aceite, las uvas y el vino; los frutos del trabajo agrícola de nuestra tierra.
Por el Sr. Obispo de nuestra Diócesis quedó decretado este domingo, 7 de octubre, como fecha en la que los hermanos y devotos aracelitanos podrán lucrar las indulgencias plenarias que en este Año de gracia, Jubilar y Aracelitano, desde la Santa Sede se han concedido.
Como es tradicional, la ceremonia religiosa se celebrará en el entorno de una misa flamenca quedando el cante a cargo de Julián Estrada, cantaor flamenco de Puente Genil que será acompañado a la guitarra por Luis Calderito.