Es para mí un honor y un privilegio dirigirme a todos vosotros como Hermano Mayor de la Real Archicofradía de María Santísima de Araceli, una institución profundamente arraigada en la devoción mariana y en la historia de nuestra querida ciudad de Lucena.
Nuestra archicofradía, a través de sus siglos de historia, ha sido siempre un faro de fe y esperanza, que nos ha guiado bajo la amorosa mirada de nuestra querida Madre, María Santísima de Araceli, Patrona de Lucena y del Campo Andaluz. Cada uno de nosotros, como devotos aracelitanos, hemos encontrado en Nuestra Madre consuelo en los momentos de dificultad y alegría en nuestras celebraciones, siendo siempre nuestro refugio, auxilio y guía en el camino de la vida cristiana.
En este espacio, quiero expresar mi más sincero agradecimiento a todos los hermanos y hermanas que, con su entrega, esfuerzo y compromiso, hacen posible que nuestra Archicofradía siga siendo un lugar de encuentro para quienes buscan fortalecer su fe y crecer en el amor a Dios a través de Nuestra Madre. Es vuestra dedicación la que mantiene viva la llama de esta devoción, permitiendo que generación tras generación se acerquen a María, sintiendo su cercanía y protección.
Como Hermano Mayor, me comprometo a seguir trabajando con el corazón para que nuestra Archicofradía continúe siendo un pilar fundamental para la fe cristiana. A través de las distintas actividades litúrgicas, formativas y caritativas, seguiremos acercando aún más, si cabe, a Nuestra Madre a todo el pueblo de Lucena.
En este camino, os invito a todos los que habéis depositado vuestra confianza en mi persona, a participar activamente en la vida de nuestra Archicofradía, a fortalecer nuestros lazos de hermandad y a seguir extendiendo el amor y la devoción a María Santísima de Araceli. Sigamos unidos en oración bajo su manto protector, porque junto a Nuestra Bendita Madre encontraremos siempre la paz y la fortaleza necesarias para enfrentar los desafíos de la vida.
Que la bendición de María Santísima de Araceli nos acompañe siempre.
ARACELI EN EL CORAZÓN.
Gregorio Espejo Jiménez
Hermano Mayor de la Real Archicofradía